domingo, 5 de abril de 2015

Herejes - Leonardo Padura

     Leonardo Padura es un periodista y escritor cubano (La Habana, 1955) que se dio a conocer en el mundo de la novela por su personaje central, Mario Conde (nada que ver con el ex-banquero engominado), teniente de policía en La Habana hasta que en "Paisaje de otoño" (1998) deja el cuerpo definitivamente. A partir de ese momento, en las obras posteriores, Mario Conde se dedica a localizar y revender libros antiguos y raros, además de actuar como detective ocasional por encargo.

     "Herejes" (Tusquets Editores, 2013) es la última aventura de este personaje. Realmente, el libro está compuesto por tres obras distintas, la primera y la tercera situadas en La Habana actual, y la segunda ambientada en Amsterdam en el s. XVII. El nexo de unión de las tres partes es un óleo de Rembrandt, propiedad de una familia judía y desaparecido en las puertas del inicio de la segunda guerra mundial, en un vergonzoso hecho histórico acaecido en Cuba. Sin embargo, cada una de las diferentes historias puede ser leída de forma independiente, aunque incorpora datos que permite entender hechos de las otras dos. Mario Conde aparece como personaje principal de las dos historias ambientadas en La Habana.

     Sin lugar a dudas, Padura es un excelente escritor, reconocido ya como un gran autor en lengua española. En esta obra en concreto, la documentación sobre los hechos históricos novelados es excelente, muy trabajada y veraz, dando lugar a una novela muy interesante, aunque con una densidad importante en determinados momentos. 

     Personalmente, me resultó realmente interesante la forma de narrar el pulso de la vida en La Habana, donde reside el autor, con evidentes críticas hacia determinados cuestiones, pero sin cargar las tintas hacia ningún lado. Por su parte, el personaje de Mario Conde me resulta un poquito falto de personalidad, digamos que demasiado "bueno". Me falta esa parte oscura que a mi entender enriquecería al personaje. Sin embargo, es una buena novela, que recomiendo sin dudarlo.

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